sábado, 23 de febrero de 2008

Apertura del blog

Hola. Soy el productor. Pueden llamarme productor.
Aquí estoy, un poco cansado porque tuvimos fiesta de presentación del blog. Estuvo todo el jet set. Mirtha, Susana, Pancho, la Claudia, Moria, Gerardo, Guillote, Charly, Diego, Marcelo, Nico, Pablo y Pachu, Lalo y un montón de gente que tiene un solo nombre.
Estuvo todo muy divertido. Los sambuches de mortadela fueron la sensación de la fiesta por ser la novedad, los mismo que la sangría y el clericot de sidra.
Como no queríamos que este momento no quedara en el olvido, contratamos a una artista moderna, una de esas que hace unos años era una hippie muerta de hambre de Palermo Viejo y ahora es una vanguardista re taaaaaaaap de Palermo Soho. Se le encargo un busto recordatorio. Me dice: "¿Lo que?" Un busto recordatorio le repito.
En fin, llego el momento. La artista Martha Pirulín, se presento con sus gigantescas gafas y su pelo recogido, subió al escenario, se acerco a la obra, que estaba cubierta con una frazada vieja, como para generar suspenso, y dijo: "¿Querían un busto p'al recuerdo? ¡Acá ta!


Ahí nomas me saqué y le dije: "¡Un busto recordatorio pelotuda! ¡No dije un busto para el recuerdo!"
Cuando ella ya estaba por llorar, Nico dijo "llego la morfiiiii", y entraron 15 chicas entangadas con bandejas repletas de zapallitos rellenos. Todos tranquilos de nuevo. Un busto es un busto y listo, a morfar.
Terminamos y el dj nos puso a bailar. Estaba todo bien hasta que alguien le grito: "¡Ponete una cumbia gato!" y se zarpó. El dj le contesto que él pasa lo que quiere, y agregó: "pescados como vos me los morfo crudos en el desayuno"
De pronto se escucha por los parlantes una voz ronca y firme que cantaba "las chicas quieren chacha, las chicas quieren chacha..." y se abrió el telón.
¡No podíamos creer lo que veíamos! ¡El Pocho se corporizo para la fiesta! ¡Y se puso a cantar cumbia para sus seguidores negritos y peronistas!
Y todos a bailar. Meneo por aquí, meneo por allá. Polleras cortas exhibiendo más de lo debido.
Y de repente lo mismo de siempre, un desubicado que inició el conflicto. Primero el grito de guerra y después la hecatombe, la debacle total. Una seguidilla de hechos bochornosos que involucra a los desubicados de siempre, al dj gato, a Martha Pirulín, a Mirtha, Susana, Pancho, el Pocho, el resto y un par de colados que andaban por ahí.
Y todo porque alguien grito "¡Viva Perón!"y todo se fue a la mierda.